Siete piezas de alfarería de gran tamaño, asociadas al período Alfarero Tardío del área centro sur chilena, pertenecen al Museo de Historia Natural de Concepción. Los atributos de este conjunto reflejan funciones ocultas hasta ahora, vinculadas a la acumulación y a usos utilitarios-domésticos, y refieren, de forma indirecta, a procesos de producción de alimentos durante los siglos XI al XV d.C., algunos de los cuales se han perpetuado hasta la posteridad.
El tamaño de las vasijas permite contener grandes volúmenes, haciéndolas propicias para el almacenamiento de excedentes líquidos y sólidos. La variación en las formas y posiciones de las asas, permitían la manipulación y el transporte de materiales.
En las vasijas se observan marcas de hollín propias de la alteración térmica, para actividades de cocción o tostado de alimentos, así como decoraciones realizadas con con técnica negativa o impronta de hojas.
Una característica destacable de estas vasijas es la presencia de varias perforaciones en el cuerpo, las que estaban destinadas a reparar grietas. Estos agujeros se realizaban a ambos costados del daño y de forma paralela, y por ellos se pasaban cuerdas vegetales o de cuero para juntar ambos lados y reparar la rotura.